Estimula su desarrollo con una rutina saludable
Cuando afrontas la edad escolar de tus hijos necesitas cambiar los hábitos que tienes hasta ahora, desde su dieta alimenticia hasta las actividades que realizan en su tiempo de ocio. Existe una relación cercana entre un niño sano y su rutina diaria, mientras mejor se alimente, se hidrate y practique cualquier tipo de ejercicio mejor será su desempeño estudiantil.
Haz una lista de qué come en el desayuno, merienda y cena, incluye cómo gastan sus energías, ya sea viendo televisión o jugando con la Tablet. Partiendo de estos puntos te explicamos qué debes incluir y descartar definitivamente. Conseguir “A” en todas sus clases no sólo depende de ellos, tú ejerces un papel importante dentro de esta aventura intelectual.
Desayuno: valioso tesoro
Es el más importante de todas las comidas por ser la primera del día, debe incluir leche, cereales, huevo, jugos bajos en azúcar, saborizantes y aditivos, preferiblemente zumo de fruta natural, y tostadas. Las porciones varían de acuerdo a cada niño o adolescente, todos tienen necesidades diferentes que se determinan en las acostumbradas visitas al pediatra.
Almuerzo: recupera energías
Debe proveer la energía gastada en el colegio, mientras tuvo un examen, exposición, acto especial, entre otros. A esta hora del día el cuerpo pide reposar y recargar las “baterías”, por lo tanto un plato que incluya, carne, pescado o pasta con vegetales y fruta para el postre será más que nutritivo.
Cena: listos para el día siguiente
Generalmente antes de este plato vendrá una merienda ligera; una porción de fruta, yogurt o un vaso de leche, lo que significa que la cena debe ser fácil de digerir antes de dormir. Una mini hamburguesa casera de pollo acompañada de una pequeña porción de fruta bastará.
¿Cuántas porciones debe comer mi hijo?
Gracias a la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura podemos establecer una medida estándar según la edad:
Incrementa
- La actividad física: cualquier tipo de deporte es bueno, natación, soccer, baloncesto, danza, el ejercicio distrae la mente y estimula la concentración, además de evitar el sobrepeso
- Una dieta variada para que los niños no rechacen la comida, sobre todo cuando se trata de vegetales y legumbres.
- Los chequeos médicos de rutina para evitar cualquier descontrol físico. No se trata de ir al doctor mensualmente, pero sí de cumplir con las citas establecidas por el experto.
- La confianza en sus hijos, el equilibrio físico y emocional trabajan en conjunto para el éxito escolar.
Lisselte Vásquez/Especial para Westchester Hispano
Publicado el 27 de Febrero, 2016