Descubre las peores combinaciones a la hora de comer
El ritmo de vida, el poco tiempo entre el hogar, los niños y el trabajo son los escenarios perfectos para, literalmente, comer lo que sea y en el momento que se pueda. Pocas veces te detienes a concientizar si tus alimentos te satisfacen o si el nivel de nutrición para tu organismo es el adecuado. Algunas combinaciones las adquiriste desde la infancia, mientras que otras las aprendiste conforme tus responsabilidades te permitieron establecer una rutina.
Cereal con gaseosa
La fibra que aporta los cereales es interrumpida por el fosfato de los refrescos, en cualquier de sus presentaciones. Muchas personas tienen la falsa creencia que las gaseosas de color claro afectan menos en comparación a las oscuras.
Agua para pasar las comidas
Beber agua antes o durante la ingesta de alimentos interrumpe la normal absorción de vitaminas y minerales. Además da la sensación de llenura rápidamente por lo que el hambre se reduce considerablemente. Comes menos, te nutres menos.
Pan con avena
Mezclar dos alimentos del mismo grupo provoca un alza representativa, en este caso los carbohidratos. Repercute en la digestión, y por supuesto en la masa corporal del individuo. Igual sucede con la combinación de la papa y el arroz como contorno en un mismo platillo.
Salsas en exceso
En un guiso de pollo o carne corta las enzimas de los jugos gástricos obstruyendo la distribución proporcional en el cuerpo. Las salsas le dan el sabor justo y necesario a las comidas, sin embargo el abuso de ellas restará beneficios y sumará desventajas.
Azúcar+azúcar
Cuando las bebidas ya están endulzadas al igual que los alimentos es 100% seguro el aumento de las calorías en cada porción de comida. Incluso, las probabilidades de padecer Diabetes se multiplica en comparación al estándar promedio.
Comida chatarra y bebidas light
Tiene un efecto psicológico de “menos culpa” al darse gusto comiendo pizza, hot dog y hamburguesas mientras el paladar se refresca con bebidas que contienen colorante, fosfato y edulcorantes. La primera impresión es “estoy comiendo mal pero la gaseosa me compensa”. Incorrecto, las calorías siguen siendo las mismas y el mal hábito se mantiene.
Frutas dulces con azúcar
La manzana, el melón, la pera, la uva junto el sirop y la crema pastelera, por nombrar las más comunes, son protagonistas de muchos postres. Ambos representan la combinación de azúcar con proteínas, lo cual produce fermentaciones retenidas en el estómago hasta ocasionar una indigestión indeseable.
Sala de Redacción/WestchesterHispano
Publicado el 03 Enero 2015