La armada rusa lanzó 26 misiles de mediano alcance hacia Siria desde barcos en el Mar Caspio, escalando la intervención en el conflicto que comenzó hace una semana con bombardeos aéreos.
Los misiles viajaron casi 1.500 kilómetros, atravesando espacios aéreos sobre Irán e Irak pero evitando sobrevolar Turquía, antes de golpear 11 blancos de grupos no especificados.
En una reunión televisada entre el presidente Vladimir Putin y su ministro de Defensa, Sergei Shoigu, el mandatario ruso celebró la precisión del ataque, que dijo “muestra altas capacidades” del aparato militar de su país.
Los ataques han sido coordinados con una ofensiva terrestre que incluye al ejército sirio, fuerzas de Hezbolá, y apoyo aéreo ruso, la cual busca recuperar territorios tomados por los insurgentes opuestos al régimen de Bashar al-Assad hacia las montañas.
Funcionarios rusos han insistido que aunque las bombas estén cayendo en territorios dominados por la insurgencia, en realidad su ofensiva persigue golpear al grupo Estado islámico.
Así Reporto: voanoticias.com
Publicado el 07 Octubre 2015