Todos celebramos el día en que nuestros pequeños descendientes reciben regalos y en su honor se celebra una magnífica jornada gastronómica

Carlos Bernales (Cabe)/ New York Hispano / Colaborador
Nueva York
La Navidad, es decir el 25 de diciembre, es una fecha que congrega, en el mundo cristiano, a las familias para celebrar el nacimiento del Niño Jesús. Si bien es cierto la fecha en sí es muy controversial, pues coincide con los festivales del solsticio de invierno en el hemisferio norte, también alude al cumpleaños de Julio César… pero mejor dejemos ese debate para los historiadores y pasemos al tema que ocupará estas líneas y que surge de la pregunta de nuestra editora, ¿Cómo celebran la Navidad los inmigrantes en esta parte de los Estados Unidos?
Sabido es que los hispanos, tenemos diferentes trasfondos culturales para cada ocasión, sin embargo existe un común múltiplo para esta fecha, todos, desde Río Grande hasta Tierra del fuego, celebramos esta fecha llamada Navidad, como la fiesta de los niños, el día en que nuestros pequeños descendientes reciben regalos y en su honor se celebra una magnífica jornada gastronómica.
Describir cómo es esta festividad en cada uno de nuestros países o incluso en regiones de nuestros terruños, originaría una enciclopedia de varios tomos. Esta vez, con permiso de las demás naciones hablaremos de cómo celebran algunos peruanos en Nueva York y New Jersey.
“Hacemos una combinación de ambas fiestas, nos dice la cajamarquina María Briones Céspedes, al tiempo que, para ponernos en onda, entona unos villancicos de su tierra:
Esta noche nace el niño
Entre la paja y el hielo
Como pudiera el niñito
Vestirse de terciopelo”

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Cajamarca es un departamento del Perú pleno de tradiciones coloniales. De hecho, la ciudad capital del mismo nombre, fue el primer asentamiento español tras la captura del Inca Atahualpa, pero conserva aun fragmentos de la cultura precolombina.
Una mesa puesta al azahar que, sin embargo, parece un diseño navideño, donde sobresalen las deliciosas cachangas, un pan que se prepara en el norte del Perú sin levadura, solo harina, agua una pisca de sal y otra de azúcar está servido para ser acompañado con chocolate caliente. La señora Briones nos explica que en su familia, su esposo, Luciano Pereira, es portugués y junto a sus hijos Jennifer y David, se celebra la navidad a la peruana. El 24 de diciembre por la noche, asisten a la clásica Misa del Gallo y luego ya el 25, continúa la fiesta al estilo americano preparando potajes típicos de la navidad peruana, acompañada del pavo relleno, papas horneadas, arroz. Por su parte, don Luciano agrega el famoso bacalao a la portuguesa.
Pero, sin duda, el centro de atención del hogar de los Briones, se enfoca en la reproducción del nacimiento de Jesús en su pesebre, flanqueado por el burro y la vaca, animales traídos por los conquistadores a los que se adicionan llamas, alpacas, auquénidos andinos, toda una proeza artesanal que se repite año tras año, en Perú, desde tiempos inmemoriales. El niño Jesús, en lares cajamarquinos, también recibe el nombre de Niño Manuelito, (que en arameo, significa Dios con nosotros) y desde su tierra natal María Briones trajo su repertorio de villancicos que durante años ha ensayado con niños para adornar musicalmente la llegada del Niño Dios.
Ensalzados de contentos
Los pastores en la choza
Venimos en el momento
A dar nuestra voz al viento
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María Briones reside en Estados Unidos desde hace poco más de 30 años, en el poblado de Nutley, Newark, Nueva Jersey, su esposo, don Luciano, construyó en el jardín de la casa un horno de ladrillos, donde María prepara sus cachangas y deliciosos potajes como el lechón asado entre otros platos típicos de la gastronomía peruana y también portuguesa.
Cabe señalar la coincidencia de que en la casa de los Pereira Briones se encontraba un grupo de familias peruanas, residentes de Nueva York, organizando las festividades de Año Nuevo, lo que nos dio pauta para preguntar si seguían las tradiciones peruanas o ya se habían aclimatado a las formas estadounidenses.
Benilda Campos, natural de Pisco, está casada con Valerio Tundarachi, de la soleada Piura, al norte del Perú. Pisco es la región de donde proviene el licor bandera de los peruanos. Benilda nos cuenta que en los siete años de residencia en este país, mantiene la tradición tal como la describió María Briones, pero en sus costumbres ellos sustituyen el pavo por el pollo a la brasa, o chanchito al palo, ensalada rusa… “igual como en Perú, pues…” nos dice en medio de una clamorosa sonrisa.
Otras familias peruanas se encuentran reunidas y con seguridad no solo recuerdan con añoranza las costumbres del país que les vio nacer sino también las tradiciones familiares. Al despedirnos, volvemos a mirar el nacimiento imaginando que con Jesús rememoramos el nacimiento de nuestras propias vidas y así nos llevamos en el recuerdo, la maravillosa hospitalidad y los versos del Villancico entonado por María Briones.
Al son de nuestra tonada
Con dulces y alegría
Venimos todos contentos
a saludar a María.

Publicado el 10 de Diciembre, 2021