Los demócratas progresistas en la Cámara de Representantes se están preparando para exigir una revisión integral del sistema de inmigración de los Estados Unidos cuando la administración Biden y un nuevo Congreso estén en su lugar a principios del próximo año. Este esfuerzo de reforma irá más allá de revertir las políticas extremas antiinmigrantes de la administración Trump, con el objetivo declarado de “crear un proceso de inmigración justo que defienda nuestros valores”.
La representante Pramila Jayapal, demócrata de Washington, presidenta del Caucus Progresista del Congreso, anunció esta nueva campaña para la reforma migratoria el 11 de diciembre.
Según Jayapal, presentará una resolución llamada Hoja de Ruta hacia la libertad tan pronto como se asiente el nuevo Congreso.
La premisa de la resolución es:
“Es deber del Gobierno Federal desarrollar e implementar una Hoja de Ruta hacia la Libertad con el fin de reformar el anticuado sistema de inmigración en los Estados Unidos que no ha tenido una reforma significativa durante décadas, y aliviar el gran impacto humano que tiene un sistema injusto comunidades de todo el país “.
La Hoja de ruta va mucho más allá de las reformas migratorias prometidas por el presidente electo Biden. Pero existe una superposición sustancial entre los dos. Ambos se han comprometido a crear un camino hacia la ciudadanía para los inmigrantes indocumentados, poner fin a la detención con fines de lucro, invertir en alternativas comunitarias a la detención y mejorar las protecciones para los trabajadores inmigrantes.
Pide una revisión del sistema de tribunales de inmigración y las sanciones que impone y también busca ofrecer reparación a las personas que han sufrido las inequidades del sistema de inmigración en el pasado.
La hoja de ruta está copatrocinada por los representantes Jesús “Chuy” García (IL), Veronica Escobar (TX), Alexandria Ocasio-Cortez (NY), Judy Chu (CA) e Yvette Clarke (NY).
- Componentes de la hoja de ruta se encuentran:
- Crear un camino hacia la ciudadanía para los 10.5 millones de inmigrantes indocumentados del país.
- Limpiar el atraso existente de solicitudes de naturalización.
- Dar prioridad a la unidad familiar eliminando las barreras a la reunificación familiar y creando un proceso “para que las personas elegibles que son deportadas, detenidas o en santuario” se reúnan con sus familias y regresen a los Estados Unidos.
- Establecer un sistema de “consecuencias civiles escalables para las violaciones de inmigración” para que la detención y la deportación no sean el castigo predeterminado para casi todas las infracciones de la ley de inmigración.
- Eliminar los centros de detención de inmigrantes con fines de lucro.
- Poner fin al uso de prisiones y cárceles estatales y locales para la detención de inmigrantes.
- Promover alternativas a la detención y poner fin a la detención de “poblaciones vulnerables” como familias y niños.
- Asegurar que “ninguna persona sea removida, expulsada o negada la admisión [a los Estados Unidos] sin un acceso garantizado y significativo a la defensa legal”.
- Crear un “sistema de tribunales de inmigración independiente” en el que los jueces puedan ejercer discreción.
- Reinventar las políticas fronterizas “invirtiendo el flujo de dinero hacia los dañinos muros fronterizos, barreras y ‘muros virtuales’” que militarizan la frontera y violan los derechos y libertades civiles.
- Acabar con los puestos de control de la Patrulla Fronteriza en el interior del país.
- Asegurar que “todas las personas que son contratadas para satisfacer las necesidades verificables del mercado laboral puedan cambiar de empleador, traer y vivir con sus familias y obtener una hoja de ruta hacia la ciudadanía”.
- Garantizar el acceso de los “inmigrantes a la atención médica y la vivienda”.
- Crear “un proceso de verdad y reconciliación para brindar justicia a quienes han sufrido bajo un sistema injusto e inhumano durante décadas”.
- Publicado 22 de Diciembre 2020
