
Hacer deporte es una de las cosas más importantes para cuidar la salud, pero no siempre se tiene tiempo para hacer un entrenamiento completo. Es por eso que buscamos disciplinas que ejerciten toda la musculatura, para sacarle el máximo partido a esos minutos al día que podemos dedicar a hacer ejercicio.
Si te encuentras en esta situación, puede que el método LET sea la solución a todos tus problemas. Se trata de una estrategia de entrenamiento muy intensa pero también breve, destinada para maximizar sus beneficios con solo 15 minutos al día. Eso sí, ese cuarto de hora debes poner todo de tu parte.
En qué consiste el método LET
LET son las siglas de Low-volume, Efficient Training o lo que es lo mismo, Entrenamiento Eficiente de Bajo Volumen. Se basa en sesiones de entrenamiento muy cortas de 15 minutos, con una selección específica de ejercicios multiarticulares (que implican varios grupos musculares) y un enfoque en la intensidad controlada.
La idea de este método es realizar pocas series de cada ejercicio, pero centrándote sobre todo en la calidad del movimiento, con el único objetivo de aprovechar cada repetición al máximo. Es decir, se busca el estímulo muscular y articular óptimo con el menor desgaste posible.
Muchas veces, con la obsesión generalizada por hacer cuantas más repeticiones mejor, nos olvidamos de la técnica. Eso hace que la calidad del ejercicio vaya decayendo conforme aparece la fatiga, lo que provoca que no se trabajen los grupos musculares adecuados y que nos arriesguemos a sufrir una lesión.
La estructura clásica de una sesión LET incluye tres o cuatro ejercicios claves realizados con peso corporal o, como mucho, una carga moderada. En lugar de trabajar con muchas series o repeticiones, se hace un número reducido de series, pero estas tienen que ser cercanas al fallo muscular. Es decir, que en la última repetición sientas que no serías capaz de hacer ni una más.
Los ejercicios que emplea el método LET son ampliamente conocidos por la mayoría de nosotros: sentadillas, flexiones, remo, plancha… la clave está en no hacer demasiadas repeticiones. Por ejemplo, sería suficiente con hacer dos rondas y trabajar cada uno de los movimientos durante 30 o 60 segundos enfocándote en la calidad del ejercicio, no en hacer cuantas más repeticiones mejor.
Por otro lado, uno de los pilares del método LET es la autorregulación, lo que significa que adaptas la intensidad a cómo te sientes en el momento del esfuerzo. Si estás cansado, lo reduces ligeramente, pero si te notas fuerte, puedes aumentar un poco más. Esta flexibilidad lo hace sostenible a largo plazo y útil tanto para principiantes como para personas con experiencia.
El método LET tiene muchos beneficios: no sólo ahorra tiempo, sino que también reduce el riesgo de lesiones, mejora la adherencia al ejercicio y permite obtener progresos reales, aunque no tengas mucho tiempo. Además, como los ejercicios se realizan con el peso corporal o, en casos más intensos, con peso libre, puedes hacerlo desde tu casa.
Publicado el 25 de Abril, 2025