Pequeños dolores y molestias
Ya sea que se trate de una vieja lesión que sigue apareciendo o el comienzo de la artritis, es más probable que sienta algunos dolores con más frecuencia a medida que envejece. El movimiento regular puede aliviar el dolor y hacer que sus articulaciones sean más flexibles. Pruebe ejercicios de bajo impacto como natación, yoga y tai-chi. Las almohadillas térmicas o las bolsas de hielo también pueden ayudar. Si no le brindan suficiente alivio, hable con su médico sobre los medicamentos de venta libre o recetados, como los medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE).
Arrugas
Estos aparecen a medida que su piel se vuelve más delgada, seca y menos elástica. Pero algunas cosas pueden empeorarlas, como fumar y los rayos ultravioletas del sol o una cama de bronceado. Para aliviar estos signos del envejecimiento, proteja su piel del sol y, si fuma, deje de hacerlo. Algunos productos para la piel, como humectantes o retinoides recetados, pueden hacer que las arrugas sean menos visibles. Pero deberá darles tiempo para que funcionen; la mayoría necesita de 6 semanas a 3 meses para mostrar resultados. Un dermatólogo puede ayudarlo a saber qué funcionaría mejor para usted.
Piel seca
La protección solar y dejar de fumar también ayudarán con este problema. También observará la cantidad de alcohol que bebe, ya que puede deshidratarlo. Es una buena idea mantener las duchas o baños por menos de 10 minutos y usar agua tibia en lugar de caliente. Luego, aplique una crema hidratante espesa a base de aceite por todo el cuerpo de inmediato.
Pérdida de músculo
Muchas personas pierden fuerza y resistencia a medida que envejecen, pero la razón no se trata realmente del proceso de envejecimiento. Mucha gente simplemente deja de trabajar los músculos clave. La frase “úselo o piérdalo” se aplica aquí, así que vea si puede comenzar a entrenar con pesas para aumentar su fuerza. El ejercicio regular, como caminar, hacer jardinería o nadar, también puede ayudar. Apunta al menos 30 minutos al día; puedes dividirlo en dos sesiones de 15 minutos si eso te funciona mejor.
Cambios de sueño
Su necesidad de dormir no cambia a medida que envejece, pero su capacidad para hacerlo sí puede. Las personas mayores tienden a tener más dificultades para conciliar el sueño, tienen períodos más cortos de sueño profundo y se despiertan con más frecuencia en medio de la noche. El café y el alcohol pueden causar esos problemas, por lo que reducirlos puede ayudar. Y es importante mantener bajo control las condiciones de salud que pueden afectar su sueño, como la presión arterial alta o la ERGE. Hable con su médico si a menudo tiene problemas para dormir.
Fallos de memoria
Pueden sentirse alarmantes, pero son parte del proceso normal de envejecimiento. Su cerebro cambia a medida que envejece, lo que puede afectar la forma en que recuerda las cosas. Es posible que deba apoyarse en algunos trucos, como llevar listas, seguir una rutina y colocar los elementos en un lugar determinado. Pero algunos hábitos también le ayudan a mantener la memoria aguda. Por ejemplo, a menudo se ha demostrado que estar rodeado de amigos y familiares aumenta la capacidad de su cerebro. El ejercicio regular y comer alimentos saludables también son fundamentales.
Aumento de peso
A medida que envejece, no quema calorías como solía hacerlo. Pero puede contrarrestar ese metabolismo más lento siendo más activo y observando qué y cuánto come. Haga que las frutas, verduras y proteínas magras sean partes clave de su dieta. Además, limite el azúcar y los alimentos con alto contenido de grasas saturadas. Y vigile el tamaño de las porciones.
Orinar con más frecuencia
La vejiga y los músculos pélvicos se debilitan con la edad. Otros problemas de salud, como agrandamiento de la próstata, pueden empeorar el problema. Fortalezca el área con ejercicios de Kegel (apriete los músculos como si estuviera tratando de contener la orina) de 10 a 15 veces, tres veces al día. Su dieta también marca la diferencia. Consuma mucha fibra y limite las bebidas azucaradas y carbonatadas y la cafeína. Si tiene problemas para retener la orina, gotea, tiene una necesidad urgente y repentina de orinar o tiene dolor cuando va, consulte a su médico.
Manténgase al tanto de su salud
La mayoría de los adultos mayores tienen al menos un problema de salud, como una enfermedad cardíaca o diabetes. Si lo hace, es importante que se someta a chequeos regulares, mantenga sus recetas surtidas y siga todas las instrucciones de su médico. Los chequeos son clave incluso si no tiene una condición de salud para que pueda detectar cualquier problema temprano y obtener consejos para mantenerse saludable.
Publicado el 17 de Marzo 2021
