La mayoría de las infecciones pueden prevenirse con una buena higiene bucal para evitar las enfermedades

Las infecciones en la boca se producen por las bacterias bucales. Las más conocidas son la caries y la enfermedad periodontal, que afectan tanto a niños como a adultos.
Pero, la mayoría de las infecciones pueden prevenirse con una buena higiene bucal y muchas de ellas solo duran unos días, especialmente las que son habituales en la infancia. Pero otras afecciones dentales son más graves y pueden prolongarse largo tiempo.

Conoce las más frecuentes:
- Caries dental. Es el resultado principal del deterioro dental y una de las infecciones bucales más comunes. Constituye una de las causas de pérdida de dientes y está causada por bacterias como el Streptococcus mutans.
- Gingivitis. Las bacterias responsables de la gingivitis son diversas y, cuando se instalan en los pliegues de las encías, producen toxinas. Las encías reaccionan a estas toxinas con inflamación e hinchazón, razón por la cual pueden sangrar las encías durante el cepillado. Entre el 50 y el 90 % de los adultos tiene gingivitis, afección que, si no se trata, se convierte en periodontitis.
- Periodontitis. Si la gingivitis se extiende por debajo de la línea gingival y afecta al hueso y a los tejidos de soporte, puede convertirse en periodontitis. Se forman bolsas alrededor de los dientes, que dan paso a la inflamación y a la pérdida de hueso. Debido a esta destrucción ósea, pueden perderse los dientes.
- Enfermedad de mano, pie y boca. Es una de las enfermedades más frecuentes en niños menores de cinco años, generalmente producida por los virus Coxsackie A16 y enterovirus 71. Tras uno o dos días con dolor de garganta y fiebre, pueden aparecer ampollas algo dolorosas en el interior de las mejillas y en la lengua, así como en las palmas de las manos, las plantas de los pies y los glúteos. Por suerte, la infección suele desaparecer en tres días.
- Herpangina. Está relacionada con la enfermedad de mano, pie y boca. Infecta con mayor frecuencia a los niños de tres a diez años durante el verano y el otoño. La fiebre, el dolor de garganta y la dificultad para tragar son los primeros síntomas que aparecen, seguidos de pequeñas ampollas en la parte posterior de la boca, que forman grandes úlceras al romperse. Una infección por herpangina suele tardar de tres a cinco días en remitir.
- Candidiasis bucal. Un crecimiento excesivo del hongo Candida albicans, de origen natural, es la causa de la candidiasis bucal. Los tratamientos médicos como antibióticos, quimioterapia y radiación pueden desencadenar un brote. Se forman placas blancas con aspecto de cuajada sobre la lengua, la cara interna de las mejillas, el paladar y la parte posterior de la boca.
- Aftas. Son lesiones que se forman en las encías y otros tejidos bucales. Los dentistas las llaman úlceras aftosas y son más frecuentes en niños y adolescentes.

Publicado 18 de Setiembre del 2020