Inmigrantes indocumentados que se encuentran en libertad después de que sus casos fueran cerrados por las cortes de inmigración deben estar preparados para enfrentarse a su expulsión de Estados Unidos.
Se conoció que el gobierno de Donald Trump logró reabrir entre marzo y mayo más de 1,300 casos de inmigrantes indocumentados que habían tenido sus procesos cerrados por no considerarse una prioridad para la deportación, según reporta Reuters.
Según el análisis de la Oficina Ejecutiva de Revisión de Inmigración (EOIR), la administración Trump ha reabierto más del 300% de casos que en el mismo periodo en 2016.
Durante su gobierno Barack Obama había puesto una prioridad baja en deportar a los inmigrantes que no eran considerados como una amenaza significativa para la seguridad pública de EEUU. Esto permitió que miles de inmigrantes indocumentados pudiesen quedarse en el país en lo que volvía a verse su caso en el futuro.
Sin embargo los casos que hoy día se están reabriendo incluyen en su mayoría a indocumentados con delitos menores, tales como violaciones de tráfico entre otros.
Sala de Redacción/Westchester Hispano
Publicado el 17 de Junio 2017