Los fallos podrían indicar si los jueces romperán con la tradición de otorgar al presidente y al Congreso amplia discreción
La Corte Suprema resolverá en los próximos dos meses seis casos de inmigración, y sus fallos podrían revelar cómo evalúan los magistrados las medidas del gobierno del presidente Donald Trump en materia migratoria, en especial el incremento de las deportaciones.
Algunos de esos casos podrían decidirse incluso la próxima semana, cuando los jueces del máximo tribunal se reúnan para emitir opiniones sobre casos que se discutieron en los últimos seis meses.
Los fallos podrían indicar si los jueces romperán con la tradición de otorgar al presidente y al Congreso amplia discreción en la forma como manejan la inmigración, y qué papel pueden jugar las políticas administrativas, como la propuesta para restringir la entrada a Estados Unidos de residentes de seis países mayoritariamente musulmanes.
El presidente Donald Trump se ha comprometido a aumentar las deportaciones, en particular de personas que han sido condenadas por delitos, pero las decisiones que tome la Corte Suprema a favor de los inmigrantes en los casos pendientes “podrían hacer que sus planes sean más difíciles de realizar”, dijo Christopher Hajec, director de litigios en el Immigration Reform Litigation Institute. Este organismo generalmente apoya las acciones de inmigración del nuevo gobierno, como las restricciones de viaje.
Durante casi un siglo, la corte sostuvo que, cuando se trata de inmigración, la Casa Blanca y el Congreso “pueden salirse con la suya, con cosas con las que regularmente no podrían”, dijo el profesor de derecho de la Universidad de Temple Peter Spiro, experto en leyes de inmigración. “El tribunal ha dicho explícitamente que en cuanto a la inmigración, la Constitución se aplica de manera diferente a otros contextos”.
Dos casos de inmigración en manos de la corte ofrecen a los jueces la posibilidad de reducir la deferencia que los tribunales han dado tradicionalmente a otros poderes del gobierno en este asunto.
Uno de los casos es una demanda colectiva presentada por inmigrantes que han pasado mucho tiempo detenidos, incluidos muchos que son residentes legales de Estados Unidos o que están solicitando asilo. El tribunal está evaluando si los detenidos tienen derecho a audiencias judiciales.
En el otro caso, el tribunal dirime una impugnación a una ley federal que facilita que los niños nacidos fuera de Estados Unidos puedan conseguir la ciudadanía estadounidense si su madre la tiene, pero que lo dificulta si es su padre el que es ciudadano de Estados Unidos.
Incluso después de la legislación de 1986, los hijos de padres estadounidenses enfrentan más obstáculos al tratar de conseguir la ciudadanía para sí mismos.
Sala de Redacción/Westchester Hispano
Publicado el 20 de Mayo 2017